Para la competición de doma se usan unos vallados perimetrales de la pista, 20x40 ó 20x60ms según nivel de la competición, de pequeña altura, que simplemente buscan marcar la delimitación de la misma. Por razones de utilidad y porque no es fácil encontrar instalaciones hípicas con pistas diferenciadas para cada disciplina, generalmente se trata de vallados portátiles y lógicamente bastantes ligeros de peso.
Hay vallados construidos de tubo, madera, o PVC y con distintos diseños respecto de los postes de sujeción y travesaños. Lo usual es ver postes rectangulares o piramidales y uno o varios travesaños o listones con formas rectangulares o redondeadas. Existen algunos modelos plegables, para un almacenaje y transporte más fácil.
Este tipo de valla portátil, de baja altura, ligera y desarmable, tiene el inconveniente de su sujeción, por ejemplo frente a un viento fuerte. Por eso algunos cuadrilongos incorporan unos pinchos interiores para clavar los verticales en la arena de la pista y aumentar su resistencia al viento.
Uno de los cuadrilongos más vendidos en el mundo desde los WEG de Jerez’2002 es el de PVC-U de DURALOCK. Esa U que sigue al PVC, hace relación al tratamiento para países cálidos, con temperaturas extremas de frío nocturno y calor diurno y nos asegura que el material no cristalizará, perderá flexibilidad, astillará, ni siquiera variará su tonalidad de blanco, al menos durante los 15 años que dura su garantía.
Las pistas de flujo y reflujo, esto es las pistas con sistema de riego subterráneo, están de moda porque mantienen una humedad constante, permitiendo una buena práctica de la equitación gracias a mantener una textura de la capa superior uniforme de acuerdo con su composición. Sin embargo, en el caso que nos ocupa que son los cuadrilongos de doma, presentan el inconveniente de que la pista no se puede horadar con la pica de sujeción de los vallados, porque correríamos el riesgo de taladrar algún tubo del sistema de riego.
Para resolver éste problema DURALOCK, representada en España por LUPA, está comercializando sus cuadrilongos con la posibilidad de adquirirlos lastrados, que significa que los postes llevarán interiormente un cilindro con peso muerto que resuelve el problema, aumentando notablemente la estabilidad del cuadrilongo. El coste es el mismo que el del poste sujeto mediante picas, no se ha incrementado.
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